Me gustaría que describieras que tipo de experiencias
personales se expresan a través de tus obras.
Háblame de dos obras que para ti sean especiales:
· ¿qué es lo que la obra muestra de ti?
· ¿Cómo comienza una obra para ti?
· ¿Qué factores te permitieron crear dichas obras?
· ¿Qué diferencias hicieron en tu vida?
· ¿Cómo han influido en incrementar tu nivel de
consciencia personal, social y espiritual?
Quiero hacer una
aclaración. En este apartado estoy hablando o voy a hablar de cuadros, de
obras, no me refiero a mis trabajos de expresión y “auto-terapia”.
Surgen las
imágenes, siempre algo que veo, parado, en movimiento, en la calle, un ballet,
una foto, una conversación, una expresión…o el conjunto de todo esto. Algo que
conecta con mi interior, a veces surge una necesidad urgente por expresar,
otras veces tardo más, se va gestando, formando. Es tan importante cuando pinto
como cuando no pinto.
Son experiencias
emocionales, hay temas que vuelven siempre, como una necesidad de expresión. A veces estos temas evolucionan y me doy
cuenta de ello, a través, justamente, de lo que acabo de pintar.
Temas típicos
míos son:
·
parejas de mujeres de cualquier edad, dialogando,
·
mujeres en la playa solas, perdidas, en traje de baño
·
y ahora comienzo a pintar grupos de mujeres, en
silencio.
· También pinto personas mayores, viejillas sentadas en
bancos, me encanta!
A pesar de mi
aprendizaje, de que cada vez elijo más en la vida y mi conducta es menos
autómata, mi parte aprendida y heredada que me conforma está ahí, y del fondo
emerge de vez en cuando para decirme; aquí estoy!, esto es parte de lo que
pinto, también pinto flores, colores porque también soy eso.
Me encanta este
cuadro!, Si lo analizo y comienzo a decir “Yo soy una persona perdida, una
mujer perdida…”
ya no estoy en el
momento que lo pinté, ahora diría yo soy una persona perdida en algún momento
con herramientas para seguir adelante, con un motivo y motivación muy
importante en la vida y con los pies bien firmes. Cuando miro este cuadro sé
que aunque me pierda sé volver a mis zapatos.
Este también es
importante, no es un dibujo original mío, es de Picasso. Tuve la urgencia de
pintarlo y le llamé El Dilema, me ayudó mucho a plasmar mis partes; la parte
más sumisa, introyectada, obediente y miedosa, y mi parte más loca y peligrosa.
Mientras lo pintaba, “ellas” iban hablando, debió de ser así, porque llegaron a
un acuerdo.
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